Volumen 14. Biografías relevantes de nuestros empresarios 2023 – Tomo 3, TH, 4t-5è VOLUM. El crac del 2008. La crisis que cambió el mundo.

José Manuel Lara Bosh – Grupo Planeta

GRUPO PLANETA/ GRUPO ANTENA 3
Texto del 05/10/11 .
Fotografía cedida por Antena 3TV.
 

Referente indiscutible en el sector editorial nacional e internacional y en el de los medios  de comunicación, Grupo Planeta lleva más de seis décadas fomentando la palabra escrita, primero en castellano y catalán y luego también en portugués y francés. Su presidente, José Manuel Lara Bosch, con la vista puesta en el libro electrónico, celebra que hoy se lea más que hace 20 años. Opina que España necesita volver a ser un país productivo.

Más que una editorial

Planeta es el proyecto común de un puñado de personas que se dedican a él con entusiasmo y con la convicción de que es un buen camino para ellos y para el conjunto de la sociedad. Forman el grupo desde una empresa familiar como Planeta a empresas que cotizan en bolsa como Antena 3. En la actualidad, Grupo Planeta es mucho más que una editorial; es un grupo de empresas asociado con otras editoriales a nivel internacional, que emplea a unas 18.000 personas, la mitad de ellas en España. En Francia, por ejemplo, ya ocupamos el segundo lugar, y también en América Latina somos una de las grandes referencias editoriales. Asimismo, hemos diversificado mucho el negocio entrando en el sector de la comunicación a través de la prensa, la radio y la televisión, tanto en España como en América Latina, y en formación.

La capacidad visionaria de José Manuel Lara Hernández

Mi padre, José Manuel Lara Hernández, fundador de Planeta, supo adaptarse a las circunstancias y evolucionó con el mercado sin perder sus esencias. Cuando empezó en los años 50 editaba solamente novelas de autores españoles. Después, amplió el negocio apostando por la venta directa a particulares. Pero el gran salto lo dio mediada la década de los 60, cuando vio que el futuro de los libros en castellano estaba en América Latina y apostó por ese mercado. En los años 70 dio otro empuje cualitativo al introducirnos de lleno en el mundo de los fascículos, que vivió un auténtico boom.

Tercera generación al frente

Ya hay tres miembros de la tercera generación familiar desempeñando responsabilidades de alto nivel en el grupo, dos hijos y una sobrina. Mi hijo es director general de la corporación; mi hija, directora del Departamento Fiscal; y mi sobrina, directora general de una línea de edición completa. Mi tarea es la de ser el presidente del Grupo Planeta, tanto de medios como de contenidos, pero, por encima de tan pomposo nombre, lo que me siento básicamente es editor.

Integrados por marcas líderes como Seix Barral, Destino, Espasa-Calpe o Paidós

En el mercado español el Grupo Planeta cubre toda la oferta de lo que llamamos edición general, salvo los libros de texto escolar. A parte de la generalista Planeta, hemos ido creciendo a través de editoriales líderes como Seix Barral y Destino, consagradas a la literatura más cualificada; de Espasa-Calpe en el campo de las enciclopedias, y de Ariel, Paidós, Crítica y Deusto en la edición universitaria.

Adquisición del Grupo Antena 3 y edición en francés

Del crecimiento de Planeta de los últimos tiempos destacaría dos grandes operaciones que representaron importantes saltos cualitativos. La primera, en el año 2003, significó nuestra participación mayoritaria en Antena 3 y Onda Cero, empresas que por aquel entonces estaban necesitadas de una importante inyección de dinero. La segunda gran operación, en 2007-2008, fue la edición también en francés, que se unía así a nuestras ediciones en castellano, catalán y portugués. Elegimos el mercado francés por proximidad geográfica y cultural y porque es grande y variado.

Dos grandes mercados: Francia y Brasil

Con anterioridad a 2007 ya habíamos intentado penetrar en el mercado francés, pero encontramos una cierta prevención, tanto de las autoridades como de l’establishment editorial francés. Finalmente, en el año 2007, tras invertir mil millones de euros, accedimos al mercado francés de la mano de 27 editoriales, y hoy nuestro volumen de negocio nos reporta 900 millones de euros anuales. Solo nos supera, y por muy poco, el grupo Hachette. En Francia hemos conseguido algo que ni siquiera hemos intentado en España: introducirnos con fuerza en el mercado de libros de texto. En Brasil entramos adquiriendo una empresa de venta directa llamada Barsa Saber. Después fundamos Planeta Brasil, para la edición de libros, y finalmente montamos Planeta DeAgostini do Brasil, una filial que edita fascículos de nuestros socios italianos. Hoy tenemos allí, pues, tres empresas.

Un índice de lectura mejor que hace 20 años

Sueño cada día con que el índice de lectura de los españoles se acerca al de los franceses. De hecho, cada vez estamos más cerca. Hace 20 años el mercado del libro en España se sustentaba en poca gente que compraba muchos libros. Ahora se sustenta en mucha más gente, pero que compra pocos libros. Ha habido otros progresos: ahora es posible vender un millón de ejemplares de un libro (de Javier Cercas o Carlos Ruiz-Zafón, por ejemplo), mientras que antes no pasábamos de los 200.000.

Librero, un oficio casi artesanal

Un librero debería ser siempre vocacional. Pensar que una librería es un negocio como cualquier otro es un error. Un librero debe amar los libros y amar su profesión. Ser un buen librero es ser un buen empresario, pero a la vez es un oficio que tiene mucho de artesano. Para los editores, el librero individual es un agente básico, por eso nos preocupa que haya pocas librerías. La cuestión es: ¿hay pocas librerías porque hay pocos lectores o hay pocos lectores porque hay pocas librerías?

Precio libre o precio fijo

En Estados Unidos los puntos de venta venden el libro al precio que quieren. En Europa, en cambio, los libros se venden al precio fijado por el editor. Cuál de las dos fórmulas es la que más nos conviene es un viejo debate, pero nosotros siempre hemos defendido el precio fijo, porque en el supuesto de la libertad de precio las grandes superficies podrían bajar mucho los precios y ello podría hacer desaparecer las librerías pequeñas.

Libros en soporte informático

En Estados Unidos los libros en soporte informático –o libros electrónicos– alcanzan ya el 15% del mercado. Por tanto, podemos asegurar que es un formato con mucho futuro, aunque no desplazará al libro de papel. El libro electrónico tiene inconvenientes muy particulares, como la piratería. Existen portales piratas que cuelgan en la red libros que pueden bajarse gratuitamente, sin autorización alguna del editor, y en España este tipo de piratería goza incluso de simpatías. Así se hace difícil implantar un modelo de negocio serio. No obstante, ya tenemos más de mil libros digitalizados y seguimos haciéndolo con nuevas obras para atender a las 40 o 50 librerías digitales que existen en España en estos momentos. También hemos llegado a un acuerdo con Apple.

Tres cambios simultáneos en el mundo de los negocios

El momento actual es muy complicado, porque como consecuencia de la situación económica en España estamos viviendo tres grandes cambios simultáneos en el mundo de los negocios. El primer cambio es el de los hábitos de consumo. Hoy se da una polarización entre el consumo low cost y el consumo de lujo. Antes el precio era un factor más a la hora de decidir una compra; hoy es fundamental. El segundo cambio es el de la burbuja inmobiliaria que llevó a todo el país –también a la Administración– a vivir la cultura de los nuevos ricos; y el tercer cambio es el de la crisis general en sí misma.

Reacción tardía del Estado

El Estado reaccionó tarde ante la crisis. No tomó medidas serias hasta mayo de 2009, cuando ya hacía dos años que había síntomas evidentes de recesión profunda. Y, aunque no han sido malas en su mayor parte, han pecado de inconexión e inmediatez. Echo en falta un plan general de medidas a largo plazo por parte de la Administración que las empresas, en cambio, sí que han llevado a cabo. Hacia 2007 y 2008 todas las entidades que tenían financiación externa hablaron con los bancos para reestructurarse a largo plazo y redujeron gastos.

“Países enfermos” de diversa consideración

Grecia, Irlanda, Portugal e Italia están peor que nosotros. Francia está algo mejor, y Alemania bastante mejor. Haciendo un símil, hay países que están en la UVI, y otros que son enfermos de larga duración, pero ninguno está en el cementerio, que es lo importante. Todos los países europeos le hemos visto de alguna manera las orejas al lobo, y ello, sin duda, nos concienciará para realizar los cambios estructurales necesarios para no caer en los mismos errores. España, por ejemplo, debe replantearse el gasto sanitario y atajar el tema del turismo hospitalario, por citar algunos de nuestros grandes problemas.

Made in Spain again

Tenemos que volver a ser un país productivo. No puede ser que la mayor parte de los productos de consumo sean Made in China. Para ello es menester que haya una mentalización de los gobernantes, de los empresarios y del pueblo en general. Debe hacerse una política fiscal y económica que beneficie a quien produce en el país frente a quien produce fuera; y a nivel de calle también debe haber un cambio: hay profesiones que ningún español quiere desempeñar.

Reforma laboral: presos del calendario electoral

El de la reforma laboral es un tema muy serio. Para mí reforma laboral no significa despido libre. En España es un tema que no se ha abordado porque nuestro calendario electoral nos mantiene perpetuamente en campaña electoral, y claro, ningún partido se atreve a impulsar este cambio. Quizá convendría racionalizar el calendario electoral para favorecer cambios estructurales de tanto calado.