Texto del 16-05-2012
Desde su previa experiencia profesional y su alta preparación técnica, ambos emprendedores han sabido crear un perfecto binomio que ha llevado su proyecto empresarial a liderar la comercialización de conductores eléctricos en España. En estos tiempos inciertos, su ponderado discurso invita a que cada persona calibre su potencial y analice sus propios errores, mientras que consideran indispensable para el país recuperar una conciencia política de Estado.
Entidad nacida a consecuencia de la crisis económica de 1988
La empresa nace en el año 1988 a consecuencia de la gran crisis económica que vivió el país en aquel entonces. La compañía para la que trabajaba Juanjo como técnico tuvo que cerrar y se vio obligado a buscar nuevas oportunidades. Gracias a los conocimientos técnicos que poseía, pronto se hizo con un hueco en el sector, tanto asesorando en materia de cableado o como ejerciendo de comercial. La incorporación de Carlos como ingeniero industrial, con la experiencia ya adquirida en otra compañía del sector, terminó de completar el perfil profesional de Tecnohm, una empresa que arrancó con presupuestos y objetivos modestos aunque, al final, la efectividad de su gestión y la confianza de los clientes les afianzaron en el mercado.
La labor empresarial consiste en poner en circulación el caudal de conocimientos propios
Todavía no hemos aceptado del todo el hecho de ser empresarios. Creemos que la labor empresarial consiste en poner en circulación el caudal de conocimientos propios. No se trata de buscar un enriquecimiento inmediato, lo cual es un error y en gran medida la causa de la crisis actual. Nuestra finalidad no es tanto ser empresarios sino gestionar y solucionar los problemas que se nos van planteando, es decir, trabajar día a día para recoger al final el fruto de nuestro trabajo, lo que incluye mantener fiel a una clientela con la que crear el tejido que nos sustente en los momentos difíciles, y eso solo puede conseguirse intentando ser asequibles en todo momento y aprovechando al máximo el mayor activo que posee una empresa: las personas que la forman. Luego, el propio sector será quien nos otorgue una mayor o menor importancia.
Soluciones técnicas para el cableado eléctrico
Antes de crear Tecnohm los dos trabajamos en fábricas, lo que nos confiere una gran ventaja sobre la competencia. Los conductores eléctricos son complejos y su conocimiento requiere cierto tiempo. Todo lo relacionado con el medio ambiente y el ahorro de energía precisa una dedicación intensiva a medio plazo. Nos hemos especializado en ofrecer soluciones técnicas en todo momento para cualquier problema que pueda surgir con el cableado, porque siempre suele haber alguno antes de una instalación y cuando esta se realiza.
Vinculados al sector de las energías renovables
Hemos visto nacer las energías renovables, y hemos asistido a la rápida evolución de este sector para el que la ingeniería especializada ha ido aportando soluciones según se iba desarrollando. En España intervenimos en la mayoría de las instalaciones de parques solares y en las más importantes que se están construyendo. Recibimos el pliego realizado por los ingenieros encargados del proyecto y revisamos las incongruencias para intentar solucionarlas, cosa que ofrece al cliente mucha confianza. Por lo demás, existe un buen entendimiento entre nuestros técnicos y los proyectistas.
Proyectos termosolares en Estados Unidos, Italia, Alemania y Sudáfrica hechos por instaladores españoles
Los principales instaladores de plantas termosolares se encuentran en España, donde se ha producido el mayor desarrollo de esta tecnología: no solo somos pioneros sino que hemos sabido crecer manteniendo siempre un altísimo nivel profesional. Es cierto que hablamos de un sector que ha gozado de muchas subvenciones, pero la ayuda estatal es habitual en lo relacionado con cualquier tipo de energía alternativa. Hemos llegado a crear una sólida cultura al respecto. Los grandes proyectos que se están realizando en Estados Unidos, Italia, Alemania y Sudáfrica se deben a instaladores españoles.
Especializados en cables sin metraje mínimo
Trabajamos con un tipo de cable estándar del que tenemos existencias, pero sobre todo nos centramos en cables sin metraje mínimo difíciles de encontrar. El mercado va por delante de la normalización, y por ello ofrecemos soluciones adicionales para resolver aquellos pequeños problemas para los que aún no existe una respuesta rápida, lo que supone un trato diferencial que el cliente siempre agradece. Hemos estandarizado productos que no existían y que en su día tuvimos que fabricar para soluciones muy concretas. Además, realizamos productos específicos para demandas específicas.
Pioneros en cuanto a normativa de seguridad
En su mayor parte, trabajamos con productos de las grandes empresas españolas, pero también traemos cable de fuera para determinadas aplicaciones. Somos partidarios de defender lo nuestro, pues España es un país productor de cable importante. El 95% de nuestro aprovisionamiento lo realizamos aquí. También somos pioneros en seguridad y vamos por delante de otros países en cuanto a normativa. Hemos instalado plantas en Turquía y suministramos a Francia, Alemania, Inglaterra, Holanda, norte y sur de África, Sudamérica, etcétera.
Elevada capacitación y formación de nuestros empleados
El nivel de formación de nuestros empleados es muy alto. Si bien hemos incorporado personal ya muy bueno en lo suyo, muy bien preparado técnica y comercialmente, a otros empleados los hemos ido modelando según su formación. Un 50% de nuestros trabajadores entraron en la empresa con la formación hecha y se han adaptado a nuestros métodos, y el otro 50% lo constituyen jóvenes que se han ido formando desde el principio y en la actualidad se cuentan entre los mejores técnicos comerciales que existen en el país.
La solución a muchos de nuestros problemas reside en nosotros mismos
En el fondo, nadie se conoce mejor que uno mismo para saber el valor añadido que uno tiene y puede aportar a la sociedad. Es un autoanálisis que todas las personas debemos realizar alguna vez. La solución a nuestros problemas reside en nosotros mismos. Como empresa, podríamos justificar perfectamente un cierre de la compañía al amparo de la crisis, lo que tal vez supusiera una comodidad mental para nosotros. Sin embargo, nuestra preocupación por la situación actual y nuestra aportación pasa por el mantenimiento de los puestos de trabajo que somos capaces de crear.
Nuestros gobiernos no saben comunicar sus programas al ciudadano
Si en algo falla el actual Gobierno, y la mayoría de los anteriores, es en saber comunicar su programa de partido. En España existe una idea preconcebida del trabajo como algo inmóvil y casi vitalicio. Nuestra cultura laboral nos hace reticentes al cambio, pero la reforma laboral puesta en marcha era necesaria. No creará empleo ahora mismo, pero en cuanto empiece a haber crecimiento en el país lo favorecerá.
El arraigo de la economía sumergida, consecuencia de nuestro nivel educativo general
Echarle siempre la culpa de lo que pasa a los demás no es realista. Todos debemos asumir nuestra responsabilidad y rectificar nuestros errores. La economía sumergida, el vivir de las chapuzas, aunque casi constituya la base laboral de este país, supone una injusta competencia desleal y un perjuicio directo para las empresas que cumplimos las reglas del juego. En países del norte es inimaginable algo así y sin embargo aquí se asume como toda una cultura establecida. Esto es consecuencia de la educación general. Por desgracia, no estamos preparados para un cambio que habrá que realizar tarde o temprano.
Los cargos públicos deberían ser los estrictamente necesarios
La tecnología de la Administración española está muy avanzada, pero peca por exceso de puestos. La proporción de gestión administrativa por habitante es más elevada que en cualquier otro país europeo. Deberíamos ajustarnos a la necesidad real de las administraciones y mantener solo los cargos que fueran estrictamente necesarios.
Resistirse al cambio es alargar la crisis
El peliagudo problema de la financiación no termina de solucionarse. Resistirse al cambio es alargar la crisis, porque no se trata de un problema circunstancial; algo se ha hecho mal desde la base y es urgente solucionarlo. Desde luego que es preciso contentar a los mercados exteriores, pero no es la única manera de solucionar el problema. Crear tantos bancos malos como entidades financieras no es más que otra solución intermedia.
Incertidumbre igual a inestabilidad
Nos enfrentamos al hecho de no saber dónde estamos realmente en el largo proceso de la crisis ni adónde vamos a llegar. Nos estamos adaptando a la necesidad del momento, pasando por sucesivas etapas de incertidumbre, lo que crea una gran inestabilidad en el sector empresarial.
Una conciencia política de Estado que nos permita gestionar correctamente los fondos europeos
Debemos ser mejores gestores del dinero que nos proporciona Europa. No es un secreto que se han llevado acabo obras costosísimas pero cuya utilidad es cuestionable, lo que demuestra que para nuestra clase gobernante no existe la palabra prioridad; por eso vivimos en el déficit crónico. Nos falta un proyecto que busque equilibrar el presupuesto al final de cada ejercicio económico. Ofrecemos la imagen de un país dirigido por unos políticos conscientes de los problemas que nos acucian pero, debido a intereses partidistas, incapaces de ponerse de acuerdo para solucionarlos. Hay que reinstaurar una conciencia política de Estado en España.