ALBERTO XIOL RÍOS
ALBERTO XIOL RÍOS
TH, 3r VOLUM. El estado de derecho después de 1978

ALBERTO XIOL RÍOS. KONSAC

Texto del 15-05-2008 .
Fotografía: Àngel Font

Los nuevos tiempos han conformado una visión renovada del mundo empresarial donde predomina la prevención y la planificación estratégica en materia laboral y jurídica. Albert Xiol y su equipo se dedican al asesoramiento de empresas de forma global y multidisciplinar, primando la anticipación a los problemas. La larga experiencia profesional del señor Xiol le otorga una perspectiva privilegiada de la evolución de las relaciones laborales.

Dilatada carrera como experto en Derecho del trabajo

El desarrollo de mi carrera profesional se ha ido orientando de forma gradual hacia el Derecho del trabajo, centrándose especialmente en la defensa jurídica, en la negociación colectiva y en la tramitación de expedientes de regulación. Fui abogado para la CNS de Sabadell en la década de los 70, donde actué en la defensa de los trabajadores e intervine en conflictos laborales. Posteriormente, ejercí como abogado de Analistas de Relaciones Industriales, con la defensa de la dirección de empresa. En el año 1981 fundé Xiol Abogados. Representaba la culminación de un proceso de años de formación y de especialización. Durante el período de 2000 a 2007 fui socio director nacional del Departamento Jurídico-laboral de Audihispana. 2007 fue el año de mi unión a Konsac. El equipo de abogados laboralistas de Xiol se integró en esta compañía que proporciona servicios a los departamentos de recursos humanos de otras empresas.

 

El asesoramiento empresarial

Konsac Legal es una división de Konsac que se dedica al asesoramiento en materia de Derecho del trabajo, con especialidades como la consultoría preventiva, el tratamiento del absentismo, la estrategia laboral, la negociación colectiva, la auditoría laboral, las actuaciones judiciales y los cursos de derecho para mandos. Konsac está formada por 42 profesionales que actúan en un marco amplio desde sus oficinas de Barcelona, Madrid, Lisboa y Girona.

 

Una especialización nacida del trabajo diario

Mis comienzos en el mundo de la abogacía son incomprensibles desde la perspectiva actual. Finalicé la carrera y monté mi despacho esperando la entrada del primer cliente. Hoy en día, los recién licenciados no optan por esta opción, sino que prefieren entrar en un gran bufete y asegurarse el sueldo cada mes. Me convertí en abogado sin haber escogido ninguna especialidad. Con los años de ejercicio y la tipología de trabajos que llegaban al despacho fui adquiriendo bagaje y experiencia en Derecho del trabajo. El bufete fue creciendo en complejidad, con lo cual decidí formarme en temas de gestión de empresa y realicé un postgrado en el IESE para poder dirigir mejor el bufete.

 

De los libros de Aranzadi a la consulta de Internet

En algunas profesiones se adquiere una gran experiencia con la edad. La abogacía es una de ellas. La memoria es una pieza clave para un abogado, que en la sociedad actual ha de estar permanentemente al día de las novedades jurídicas, además de saber desenvolverse plenamente en el manejo de las técnicas informáticas. Han cambiado muchas cosas desde que la herramienta para encontrar las sentencias de referencia eran los libros Aranzadi. En la actualidad disponemos de recursos en red para consultar de forma rápida las sentencias que se van publicando.

 

Ya no existen dueños, sino empresarios

La transformación de la situación laboral de los trabajadores y de la realidad empresarial desde la década de los 70 hasta la actualidad ha sido muy profunda. Con la muerte de Franco y el advenimiento de una nueva etapa se produjo una revolución en las relaciones laborales. Para el sector empresarial, la transición hacia la democracia supuso la entrada en nuestro Estado de firmas multinacionales. Los empresarios españoles empezaron a ver que existían otros modelos de compañía donde había desaparecido el concepto de dueño y había sido sustituido por el de accionista. La figura del propietario, que antes era el amo y señor del negocio, una pieza relevante y casi omnipotente, paradigmática del mundo de la empresa tradicional, desapareció progresivamente. El empresario de nuestros días es un especialista, un ilustrado, un técnico preparado para desarrollar una determinada función dentro de un engranaje de cooperación laboral.

 

Diálogo entre sindicatos y empresas como garante de acuerdos

En este contexto de cambio, también el movimiento obrero se transformó radicalmente. La actuación sindical fue realmente importante para el cambio social y laboral del país, así como el compromiso de los empresarios para adaptarse a los nuevos tiempos y a una economía en proceso de globalización. Las corrientes radicales del sindicalismo español, en especial las surgidas a finales de los años 60, se convirtieron en una fuerza de primer orden en las movilizaciones obreras del período de la Transición. Hoy, sin embargo, el panorama social es completamente diferente; ya no hay obreros, hay empleados, y sus representantes sindicales mantienen una comunicación más o menos fluida con las empresas. Este diálogo se erige como la forma ideal de establecer acuerdos con la patronal y conseguir mejoras para los trabajadores.

 

Prevención y estrategia, armas fundamentales del mundo empresarial

El papel del abogado también ha cambiado mucho en las últimas décadas. En la actualidad, el letrado no sólo lleva pleitos, sino que trabaja en la prevención y en la estrategia. Al cliente-empresario se le guía durante un período de tiempo en los procesos de su negocio para prevenir situaciones y asegurar que actúa dentro de la legalidad. La planificación previa de la actuación es fundamental en el mundo de la empresa moderna.

 

Se necesita colaboración para erradicar los accidentes laborales

Los accidentes laborales que afectan al sector empresarial e industrial son un tema candente en nuestro país desde hace relativamente poco tiempo. Las inspecciones de trabajo y las estrictas normas sobre prevención de riesgos laborales han incrementado el interés del empresario por la búsqueda de soluciones a la alta siniestralidad. Pero no sólo el empresario debe preocuparse por esta cuestión; a veces, la responsabilidad es de los mismos trabajadores, y la falta de disciplina de algunos empleados no ayuda excesivamente a mejorar la situación. Tanto empresarios como trabajadores han de colaborar para erradicar los accidentes en la misma medida de compromiso y de seriedad.

 

Cambios en la Seguridad Social que afectaron a las empresas

Los primeros años de transición la Seguridad Social funcionaba con escaso rigor: la afiliación obligatoria al sistema era muy relativa. Muchas empresas se autofinanciaron a base de no retribuir correctamente a la Seguridad Social. Todo ello forma parte del pasado; en la actualidad, la Seguridad Social desarrolla una actuación muy rigurosa.

 

Es preciso desarrollar jurídicamente el derecho a la huelga

Los derechos constitucionales son declaraciones muy amplias de Derecho, por eso en determinados casos se hace necesaria la matización de la norma suprema. La Constitución española no matiza el derecho a la huelga y sería conveniente un desarrollo de la ley que especificara la norma.

 

Reconversión de la Administración de Justicia

La Administración de Justicia en este país es lenta, cara y está mal gestionada. A menudo, los abogados nos enfrentamos a una justicia que, al no funcionar como debiera, nos obliga a ser excesivamente pactistas –por aquello de que es mejor un mal pacto que un buen pleito–. Sólo un esfuerzo enorme de toda la sociedad hará posible su modernización. El Ministerio de Justicia debería dotar a la estructura judicial de más medios humanos (aumentar el número de jueces) y materiales (implantación de las últimas tecnologías en las oficinas judiciales). Igualmente, la simplificación de los procedimientos sería fundamental para agilizar los procesos.

 

Legislar con objetivos electoralistas

Las leyes se deberían cambiar en su justa medida. Un número mayor de leyes no hace a un país mejor. La sensación de muchos ciudadanos es que, con excesiva frecuencia, se legisla con propósitos básicamente electoralistas.

 

Recelos sobre la independencia del Tribunal Constitucional

Los magistrados de mentalidad conservadora votan en función de unas posiciones ideológicas y los progresistas, en función de otras. Da la impresión de que, a veces, actúan como un tribunal político, no de Justicia, guiados más por decisiones de uno u otro signo político que por criterios objetivos.

 

Hacia un Estado español federalista

Con la democracia, el proceso de descentralización aproximó la Administración de Justicia al ciudadano. Es lógico afirmar, por tanto, que el Estado autonómico ha contribuido al desarrollo del país. Si analizamos la situación territorial de España, vemos que estaría más acorde con su complejidad nacional y cultural constituirse como un estado federado, aunque ello se enfrentara a los miedos del patriotismo conservador más arcaico. No obstante, en el fondo se está alcanzando el federalismo por vía indirecta, a través del nuevo modelo de financiación autonómica.

 

La Monarquía como elemento estabilizador del Estado español

En el Congreso de los diputados los votos están sujetos a la disciplina de partido. El Gobierno también depende directamente de uno o varios partidos. Y el Tribunal Constitucional, como ya se ha dicho, parece depender también de una concepción política. En este contexto, el presidente de la República no sería una excepción. Sin embargo, Don Juan Carlos ha sabido mantenerse neutral y ha aportado estabilidad y equilibrio. Me considero republicano pero al mismo tiempo juancarlista. La realidad monárquica funciona: no debemos arriesgarnos a alterarla.