Texto del 26/04/05,
Fotografía cedida por el Ayuntamiento de El Burgo de Osma
Antonio Pardo Capilla es un municipalista convencido que gestiona con tesón la monumental villa de El Burgo de Osma. Las obras y proyectos realizados bajo su dirección han sobrepasado con creces los objetivos propuestos inicialmente. Además de realizar una acción insólita, como es la construcción de una carretera, ha sabido recuperar el Conjunto Histórico Artístico de la ciudad y convertirlo en un escaparate por el que es imposible pasar de largo sin detenerse.
Provengo del ámbito industrial y empresarial
He sido el único miembro de mi familia que se ha dedicado a la política, pues provengo del ámbito industrial y empresarial. Estoy convencido de que los alcaldes que hemos sido empresarios con anterioridad vemos las cosas desde un prisma diferente, quizás somos más gestores que políticos. Llevo diez años consagrado a la política municipal en cuerpo y alma y he dejado bastante de lado mi profesión. Empecé como alcalde a los 34 años y ahora me doy cuenta de que me estoy profesionalizando en el gobierno municipal, que es la mejor escuela para cualquier político, pero me he alejado de mis tareas particulares. Y, lógicamente, tendré que volver a mi actividad empresarial un día u otro.
La segunda parte de la Transición española
Los alcaldes deberíamos contar con mucha más autonomía y más recursos para que pudiéramos atender mejor a nuestros ciudadanos. Pero se nos considera meros prestadores de servicios, nos sentimos como la oveja negra de la familia. Creo que debería ser todo lo contrario, la cúspide de la actividad política de España tendría que estar vertebrada por los municipios. La segunda parte de la Transición española a la que ahora asistimos, el asentamiento de la democracia, debería considerar primordial el refuerzo del papel de los Ayuntamientos.
Hemos cumplido nuestras promesas
El Burgo de Osma es un municipio de 5.100 habitantes, situado a 59 Km de Soria y regido por un Ayuntamiento que cuenta con una plantilla de 50 personas. El programa electoral de 1995, con el que me presenté ante mis vecinos, no tiene nada que ver con los proyectos posteriores de 1999 y 2003. Puedo decir con satisfacción que todo lo que hemos prometido se ha cumplido. Se han realizado obras de gran envergadura con el apoyo de la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial de Soria. Incluso ha habido legislaturas en las que se han hecho cosas que no estaban ni siquiera planteadas inicialmente en el programa electoral.
«Las Edades del Hombre» fue un gran trampolín
Mi pueblo se ha transformado en los últimos años. El gran acontecimiento cultural de la exposición “Las Edades del Hombre”, que se celebró en nuestra localidad en 1997, supuso un trampolín que impulsó y aceleró importantes cambios y reafirmó el reconocimiento y prestigio de nuestra humilde ciudad. Tanto el Ayuntamiento como los vecinos hicimos un gran esfuerzo de organización y adaptación para atender a las más de 500.000 personas que durante seis meses pasaron por una población de apenas 5.000 habitantes.
El conjunto histórico es nuestra “tacita de plata”
Hemos realizado recuperaciones urbanísticas, rehabilitaciones de edificios históricos, de murallas, de conjuntos monumentales y de toda la zona de nuestra espléndida Catedral. El conjunto histórico es la “tacita de plata” de El Burgo de Osma, la estrella, el punto de referencia, nuestro mejor escaparate. Los visitantes que vienen a El Burgo se marchan encantados por su recogimiento, limpieza y buena organización.
Un polígono industrial y una carretera
Una de las obras que más me satisfacen es la construcción del polígono industrial, pues El Burgo de Osma carecía de esta infraestructura básica, cuando tiene un sector que genera 1.100 puestos de trabajo. Hay que tener en cuenta que El Burgo de Osma es un centro estratégico que articula toda la comarca y donde viene gente a trabajar, incluso de 50 Km a la redonda. Además, este Ayuntamiento ha construido una carretera de 2.600 metros de longitud por ocho metros de anchura para conectar la autovía del Duero con la zona del polígono industrial. A este sector se han trasladado algunas empresas que eran pequeñas pero que habían crecido de una forma extraordinaria en los últimos años.
Única población de la provincia con piscina climatizada
Hemos adaptado unas importantes instalaciones deportivas para nuestros jóvenes. El Burgo de Osma es la única población de la provincia que tiene una piscina climatizada cubierta. Aunque es un servicio deficitario, desde el punto de vista económico, hemos apostado por su realización porque, socialmente, lo consideramos rentable.
Viviendas para los jóvenes
En los últimos años, ha sido posible construir varias viviendas de protección pública con la colaboración de la Junta de Castilla y León. Así mismo, hemos puesto en marcha la edificación de 25 viviendas destinadas a los jóvenes. Aunque tenemos bastante suelo en la localidad, estamos redactando el Plan General de Ordenación Urbana de El Burgo de Osma, para poder disponer de una normativa que, aplicada a la gestión del suelo, permita el abaratamiento de las viviendas, mediante una menor repercusión del precio del terreno.
Infraestructuras pendientes
Es imprescindible que el Gobierno retome y dirija rápidamente el desdoblamiento de toda la N-122. Es el eje vertebral para toda Castilla y León, desde Portugal hasta el valle del Ebro. El anterior Gobierno lo había puesto en marcha, había un plan viario ya preparado para los próximos años, estaba previsto que en 2008 estaría terminado todo el desdoblamiento de la N-122 y ahora este asunto está bloqueado. También sería muy importante rescatar el proyecto del AVE entre Valladolid y Zaragoza, que debía pasar por la antigua línea del ferrocarril Valladolid-Ariza. Del mismo modo, es vital para la provincia que continúen los tramos de la carretera que unen Madrid con Tudela de Ebro. Se ha hecho la R-2 que va de Madrid a Guadalajara, pero faltan los siguientes tramos: Guadalajara-Medinaceli, Medinaceli-Almazán, Almazán-Soria y Soria-valle del Ebro, con lo cual uniríamos dos ejes importantes de comunicación de la meseta castellana, desde este a oeste y desde sur a norte.
En el siglo XVI se construyó la renacentista Universidad de Santa Catalina
En El Burgo de Osma no hay universidad. Aunque en el siglo XVI se construyó la renacentista Universidad de Santa Catalina, se cerró definitivamente a mediados del siglo XIX. Los jóvenes que desean estudiar una carrera tienen que ir a Soria o fuera de la provincia, pues en la capital sólo se cursan cuatro carreras universitarias. Somos conscientes de que este déficit tiene difícil solución, pues hay que recordar que la provincia entera de Soria tiene tan sólo 92.000 habitantes.
Residencias para la tercera edad
En el ámbito de la sanidad, tenemos un importante centro de salud que dispone de la mayoría de los servicios fundamentales. Hay tres residencias para la tercera edad, una de ellas recientemente inaugurada, gracias al convenio establecido entre el Ayuntamiento y la Junta de Castilla y León. Se trata de un centro con capacidad para 50 plazas que genera 22 puestos de trabajo.
Un pueblo pequeño con una gran oferta hotelera
Contamos con casi 400 plazas de alojamiento turístico entre hoteles, hostales, pensiones y posadas. El Ayuntamiento ha creado un albergue juvenil, con 60 plazas. Durante el año 2004 pasaron por la oficina de turismo de El Burgo de Osma 65.000 personas. Todas estas cifras son impensables en cualquier otro pueblo de tan pocos habitantes.
Quien no visita El Burgo se pierde la esencia de la historia
No es de extrañar que el turismo represente una gran riqueza. Quien ha pasado por aquí sabe que tenemos reunida la esencia de la historia, de la gastronomía y del mejor medio ambiente. Organizamos actos importantes todos los años, como las jornadas rituales gastronómicas del cerdo, una fiesta declarada de interés turístico nacional. Muy cerca de El Burgo podemos disfrutar del mejor parque natural de toda Castilla y León, el Cañón del río Lobos, una garganta profunda que la historia y el río han ido esculpiendo en la piedra. Todo El Burgo destila una misteriosa atmósfera de armonía y serenidad.
La Casa Real demuestra modernidad y sencillez
He tenido el honor y la satisfacción de haber recibido en mi localidad a tres miembros de la Casa Real. En 1996, estuvo la Infanta doña Elena, con su esposo don Jaime de Marichalar. En 1997, vino el Príncipe de Asturias para la inauguración de la exposición de las Edades del Hombre. En 2001 recibimos a la Infanta doña Cristina y a don Iñaki Urdangarín, con motivo de la celebración del noveno centenario de la Fundación de El Burgo de Osma. El Rey y la Reina también estuvieron tiempos atrás. Siento un respeto personal extraordinario hacia todos los miembros de la Casa Real. Han sido el punto de referencia de todos los españoles durante la época de la transición y continúan siéndolo. Han dado ejemplo de saber estar, de comportamiento y de actitud. No es una Casa Real de rancio abolengo y chapada a la antigua como se observa en otros países, sino que han demostrado modernidad y sencillez. Me siento tranquilo con la Monarquía parlamentaria que tenemos y con la función de representatividad que ejerce la Corona española. No deberíamos olvidar nunca los equilibrios que tuvo que hacer Su Majestad el Rey para poner de acuerdo a todos los partidos y a todos los políticos para iniciar la Transición española.
Habrá republicanos que serán felipistas
Así como ahora hay republicanos que se declaran juancarlistas, creo que cuando falte la figura de don Juan Carlos I, habrá bastantes republicanos que serán felipistas. El Príncipe Felipe cuenta con los atributos suficientes para poder ser algún día el Rey de España, sin ningún tipo de complejos ni problemas. Estoy orgulloso de la forma de ser del Príncipe de Asturias. Su moderación, sensatez y cordura nos ha predispuesto a la inmensa mayoría de españoles en su favor.