JUAN RAMÓN RAMOS RAICH LANDWELL-
JUAN RAMÓN RAMOS RAICH LANDWELL-
TH, 3r VOLUM. El estado de derecho después de 1978

JUAN RAMÓN RAMOS RAICH LANDWELL – PRICEWATERHOUSECOOPERS

Texto del  22/10/2008
Fotografía cedida por Juan Ramón Ramos.

Máximo responsable en España del principal despacho de abogados y asesores fiscales del mundo, Juan Ramón Ramos Raich se muestra optimista ante la crisis financiera que vive actualmente nuestra sociedad. Vinculado a la docencia en el ámbito del Derecho fiscal y tributario, insiste en la necesidad de estructurar la Administración de Justicia con una buena organización empresarial. Asimismo, señala la conveniencia de que el Rey tutele, en su día, la subida al Trono del Príncipe de Asturias.

 

Invertimos en tecnología punta e incorporamos a los mejores profesionales

Landwell-PricewaterhouseCoopers es la firma multidisciplinar y multinacional más grande del mundo, que integra tres áreas de negocio: Auditoría, Consultoría y Jurídico-Fiscal. El despacho de Abogados y Asesores Fiscales en España lo conforman más de mil personas y tiene a su servicio a 850 profesionales, entre los cuales incorporamos a los mejores: catedráticos, abogados del Estado, magistrados e inspectores de Hacienda, premios de licenciatura, etc. Contamos con recursos y medios excelentes, puesto que invertimos de forma habitual y continuada en tecnología punta. Prestamos, por tanto, un servicio integral.

 

Pasión por el Derecho fiscal

He sido profesor de Sistema Fiscal Español en la Facultad de Económicas de la Universidad de Barcelona durante quince años y he impartido varios másteres tributarios en centros de alto prestigio como ESADE y el CEF. En mi anterior calidad de presidente de la Sección de Derecho Fiscal del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona, fui uno de los pioneros en el desarrollo del uso de Internet en el ámbito tributario, al firmar en su día uno de los primeros convenios de colaboración con la Agencia Tributaria y el Ayuntamiento de la Ciudad Condal. Cualquier avance en este sentido mejora la recaudación, lo que se traduce en un ingreso directo a la Hacienda pública, en una mejora en el servicio al contribuyente y en la utilización eficiente de recursos públicos.

Con la Constitución se desarrolló el mundo científico, cultural y financiero de nuestro país

Pertenecí a las primeras promociones que estudiaron la Carta Magna. En la universidad, los ámbitos del Derecho político y constitucional eran impartidos por docentes verdaderamente progresistas, que se sentían cómodos y esperanzados frente a los cambios que se avecinaban. Ahora bien, considero que tanto ellos como el alumnado no le dábamos a aquel momento el valor histórico que a la postre ha tenido. La política siempre me ha parecido un poco lejana y quizá no percibí el gran impacto que todos aquellos acontecimientos estaban produciendo. En todo caso, recalcar que la Transición, aunque sólo fuera por el hecho de haber posibilitado la independencia de valoraciones políticas de distinto signo ideológico, ha sido enormemente positiva para España. En términos económicos, la larga duración del régimen anterior significó partir de una desventaja competitiva sustancial respecto a los países del entorno. La llegada de la Constitución de 1978 trajo aparejados una modernización y un avance en calidad de vida, renta disponible y socialización de la economía del bienestar, pero tras un período de serias dificultades económicas y tensiones político-sociales, la igualdad de derechos, qué duda cabe, potenció el desarrollo del país, impulsando la innovación y el entusiasmo de las grandes personalidades del mundo financiero, científico y cultural.

 

La Administración de Justicia tiene que seguir mejorando en mentalidad y organización empresariales

La Justicia sigue siendo objeto de polémicas en nuestro país. Es evidente que la aplicación de las grandes soluciones tecnológicas de las que disponemos hoy en día produciría una mejora substancial en su funcionamiento. Otro de los problemas de base del sistema judicial es la formación de los jueces, quienes, al acceder a la judicatura, por decirlo así, lo hacen con un rol de carácter técnico, cuando en realidad el puesto demanda hoy algo más que una buena preparación teórica, ya que es un trabajo que no consiste solamente en limitarse a dictar sentencias. La Escuela Judicial tendría que organizar sus propios módulos de formación en temas de recursos humanos y estructuración empresarial para optimizar adecuadamente los medios materiales y humanos de los que dispondrán los jueces en un futuro (o bien, si ello es factible, crear cargos de gestión empresarial que releven a los jueces de estas funciones). De hecho, la Administración de Justicia podría todavía mejorar, a mi entender, en mentalidad y organización empresariales. Pero es cierto que la tesitura económica en que nos encontramos no es la más adecuada para llevar a cabo grandes inversiones, a pesar de que la sociedad esté efectivamente demandándolas.

 

Reivindicar una mayor independencia del poder judicial

Es lógico reivindicar una independencia judicial sin fisuras y dar voz a quienes trabajan dentro del sistema a la hora de solventar las reformas que se han de abordar.

 

Una verdadera transformación de la estructura económica mundial

Estamos dejando atrás una economía especulativa a nivel mundial, empeñada en premiar los objetivos, en crecer y ganar cuota de mercado a ritmo vertiginoso, sin pensar en estrategias a medio y largo plazo. En la actualidad, la crisis que estamos viviendo responde a una verdadera transformación de la estructura económica mundial. Una parte de culpa, acaso la menor, la ha tenido sin duda la ambición especulativa no productiva, pero sobre todo ha sido un problema de tipología de negocio de riesgo. Antes, con pocos créditos saneados se ganaba dinero, pero, al bajar los tipos de interés en todo el mundo, hacen falta bastantes más créditos para ganar lo mismo. Las entidades pequeñas van a sufrir más la presente coyuntura que las grandes sociedades, a las cuales se tiende a proteger por su incidencia en la economía. En resumen, asistiremos en el ámbito financiero a diversas operaciones de concentración para ganar dimensiones y, sobre todo, solvencia. A este respecto, en PricewaterhouseCoopers hemos sido pioneros en asesorar la primera fusión de cajas de ahorros, de la oleada que previsiblemente se va a producir para ganar dimensión y consolidar solvencia.

 

Nuestro sistema económico tiene que recuperar la confianza en sí mismo

El estrangulamiento de la liquidez está afectando a la economía productiva, la llamada “economía real”, que vive unos momentos complejos. Enmarcados dentro de la economía occidental, somos un país con tendencia a la baja. La agricultura fue hasta poco, antes de la etapa de transición hacia a la democracia, nuestro soporte principal, mientras que hoy en día es residual. En España hemos pasado a enfocar nuestras expectativas económicas sobre el turismo y el sector inmobiliario, avasallados ambos por la gran competencia a nivel mundial. Nuestro sistema económico tiene que recuperar confianza en sí mismo.

 

El estado de las Autonomías ha sido un éxito político, pero presenta importantes áreas de mejora

El Estado de las Autonomías ha sido un éxito político rotundo. No obstante su desarrollo ha originado un déficit público considerable. En primer lugar, habría que fomentar aún más el desarrollo de la cooperación local, intensificar una cercanía al administrado, así como promover una sólida autogestión, de forma que el funcionariado pudiera atender sobradamente la diversidad de las necesidades públicas. Asimismo, debería evitarse a toda costa la duplicidad de competencias, de coste y de funcionarios. Por otro lado, políticamente hablando, la asunción de numerosas competencias y la aparición de nuevos estados en el panorama europeo han radicalizado ciertas posiciones en alguna autonomía y han incrementado ciertas tensiones que deberían reconsiderarse y moderarse en un futuro. Para ello, opino que deberían producirse acercamientos y consensos del tenor de los que dieron lugar a la Carta Magna.

 

Nuestra Constitución fue fruto de un consenso, de ciertos temores y tensiones

Ninguna norma es inmutable. La costumbre es una de las leyes del Derecho, todo evoluciona. Nuestra actual Carta Magna fue fruto de un consenso, de ciertos temores y tensiones. Muchos de esos temores han desaparecido hoy en día, y requiere, consecuentemente, una adecuación. Es un texto que tiene demasiados regímenes transitorios, y que ha de convertirse en algo genérico y a la vez moderno, de utilización global.

 

En general, se legisla bien en nuestro país

España es uno de los países con mayor número de leyes en el ámbito tributario. A tenor de los avances que se han producido en dicho ámbito, se está sabiendo contrarrestar esa abundancia. Estimo que, en general, se legisla bien en nuestro país, con la adecuada consulta a los expertos. Si existe la sensación de que poseemos una legislación perfectible, ello no es por un problema de técnica legislativa sino de seguridad jurídica en cuanto a criterios interpretativos, consecuencia acaso de nuestro carácter creativo latino.

El Príncipe cuenta con una excelente capacitación, que redundará en beneficio de todos

Creo que la sucesión al Trono y cuándo debe abolirse la Ley Sálica son temas que preocupan a nuestro país. Los miembros de la ejecutiva de PricewaterhouseCoopers hemos tenido audiencias con Su Majestad, el Rey don Juan Carlos, y con su Alteza Real, el Príncipe don Felipe, y considero que este último posee una capacitación y una formación excelentes que redundarán en beneficio de todos los españoles en un futuro próximo. Si se planteara una sucesión acelerada, y siempre que don Juan Carlos así lo decidiera, estoy seguro de que don Felipe sería un excelente Monarca.